Se terminó una nueva edición de la Premier League. El Manchester City conquistó el título de Primera División, por octava vez en su historia (6º en los últimos 10 años). Con los nombres propios que han marcado esta nueva temporada en la máxima categoría del fútbol inglés, desde BRITmanía Radio repasamos lo sucedido a través de nuestros colaboradores.
Mejor equipo: Manchester City. El campeón es el mejor equipo siempre. Líder desde diciembre hasta mayo, sin perder la compostura, sin tambalearse, y solo dando muestras de flaqueza en las últimas semanas, juntándose con la exigencia de sus partidos europeos. Los de Guardiola han revalidado el título ganándole el pulso a un Liverpool peleón que nunca dio el trofeo por perdido.
Mejor entrenador: Antonio Conte. Quizás no sea el más sonado. Cogió a un Tottenham que estaba hundido, con 5 derrotas en las 10 primeras fechas, y firmó nueve jornadas seguidas sin perder nada más aterrizar. Con dos puntos sacados por partido jugado, es el técnico que más ha logrado tras Guardiola y Klopp. Le ha ganado al Arsenal la batalla por la cuarta plaza y solo un brote de Covid a mediados del campeonato privó al equipo de estar algo más arriba y tener que pelear hasta el final por la Champions.
Mejor jugador: Mo Salah. Es complicado no elegir a Kevin De Bruyne, el mejor jugador del campeón, pero más complicado sería dejar fuera de este galardón al jugador que ha terminado el curso liderando la tabla de goleadores (23, empatado con Son Heung-min) y la de asistencias (13). Salah ha generado más de un gol por partido. Es decir, que tenerle en el campo, significaba empezar ganando.
Jugador revelación: Ivan Toney. Había muchas dudas sobre si el delantero mostraría en el máximo nivel todo lo cosechado en equipos de League One y de Championship. Por su paso fugaz en el Newcastle no había muchos que confiaran. El atacante del Brentford ha sido el mejor argumento para que su equipo haya mantenido la categoría y para que realmente nunca haya pasado apuros.
Equipo revelación: Newcastle. Del infierno al cielo. De descendido a puntuación impensable. Transcurría la jornada 14 y las urracas no habían ganado (sumaban siete puntos). Jamás un equipo había salvado la categoría con semejante bagaje. Pero un cambio repentino a mitad de temporada ha terminado poniendo en mitad de tabla a un equipo que, tras su confección de plantilla en verano, se sabía iba a sufrir por la permanencia y que en diciembre aún seguía siendo colista.
Entrenador revelación: Eddie Howe. Lo que ha hecho en Newcastle es digno de estudio. Con los mismos mimbres que Bruce, sacó máximo rendimiento de una plantilla que era cortísima de talento. Cambió la mentalidad del club y luego supo reforzarse con jugadores que hicieron realmente un equipo competitivo. La firma de 9 partidos seguidos sin perder es increíble para un equipo que cuando comenzó esa racha estaba en descenso. Ha ganado 12 de los últimos 18 partidos. Si le daban cinco jornadas más, peleaba por Europa.
Jugador decepción: Romelu Lukaku. Una nueva vuelta a casa del hijo pródigo que no termina de cuajar en Londres. El Chelsea, campeón de Europa 2020/2021, parecía un equipo que podría pelear en absolutamente todos los frentes con un delantero como el belga. Parecía una plantilla hecha a medida para él. En cambio, desde el primer minuto ha restado más que sumado. No ha encontrado su sitio, ha tenido diferencias con el técnico y, pese a ser uno de los mejores delanteros del mundo en un equipo que necesita gol, podría salir este verano porque ha sido más negativo que positivo.
Equipo decepción: Everton. Diseñado para algo más. En condiciones normales, para dar pelea por Europa. El equipo de Liverpool se terminó hundiendo en la tabla hasta salvar la categoría a falta de dos jornadas. Impensable a principio de temporada, con la nómina de jugadores que tenía. Lo que empezó mal, con una afición dividida por la presencia de Benítez, ex del Liverpool, estuvo cerca de terminar peor.
Entrenador decepción: Rafael Benítez. Perdió más de la mitad de los partidos que dirigió hasta que los directivos del Everton decidieron echarle. No cayó con buen pie, tuvo problemas con James desde la pretemporada y nunca hizo carburar a jugadores que él mismo pidió como Rondón o Townsend. A priori, la plantilla parecía óptima para jugar al estilo que suele proponer el español, pero fue poco más que un espejismo.
Mejor joven: Conor Gallagher. Ha hecho carburar al Crystal Palace en la sala de máquinas y se ha ganado un sitio en el Chelsea la próxima temporada. El overbooking de los blues en la medular puede hacerle salir de Londres, pero sea cual sea su destino el próximo curso, su caché ha subido.
Mejor fichaje: Bruno Guimarães. Es cierto que llegó en enero y que ni siquiera fue titular en las primeras jornadas, coincidiendo con el momento en el que el Newcastle encadenaba victorias. Pero su cierre de temporada, con un broche final en un partidazo ante el Arsenal, invita a pensar que los últimos tres meses del brasileño son solo una bisagra de lo que podremos ver el curso que viene en él, siendo uno de los mediocentros dominadores del campeonato. Unido a su precio y al salto cualitativo que debería dar el Newcastle este verano, podemos estar hablando de la primera gran pieza de una nueva era.
Momento favorito: Abrazo Mykolenko-Zinchenko y homenaje a Yarmolenko. Días después del inicio de la invasión a Ucrania, Everton y Manchester City se veían las caras, en Goodison Park. Allí, durante el calentamiento, Mykolenko (recién llegado a los Toffees) y Zinchenko se buscaron en un caluroso abrazo para luego romper en lágrimas en el banquillo (Mykolenko engalanado con una bandera de su país). Además, por el costado del estadio se desplegaba una bandera ucraniana y se invitaba a un minuto de aplausos. De manera paralela, el West Ham saltaba al césped con una camiseta y un vídeo de apoyo a su jugador ucraniano; un Yarmolenko que contaba con un permiso especial al no estar en condiciones de jugar.
✍️ Iker Valverde:
Mejor equipo: Manchester City. En el campeonato de la regularidad, el mejor equipo de la temporada siempre suele ser el campeón. Esta vez no fue diferente, ya que el Manchester City ha estado en lo más alto de la tabla durante, prácticamente, toda la campaña. En el tramo final, el Liverpool seguramente haya sido mejor, pero en el cómputo global de la temporada el equipo de Guardiola ha sido el dominador. El conjunto skyblue consigue así su cuarta Premier League de los últimos cinco años.
Mejor entrenador: Jürgen Klopp. Pep Guardiola o Klopp, Klopp o Guardiola. Vaya batalla hemos disfrutado entre estos dos genios de los banquillos una temporada más. Por su capacidad de mantener a toda la plantilla enchufada, por haber dado oportunidades a casi todos los jugadores del plantel y por su gestión de todas las competiciones que ha jugado el Liverpool, me decanto por el alemán. Además, le puso la guinda al pastel con su renovación junto a todo el cuerpo técnico.
Mejor jugador: Son Heung-Min. Como cada año, el premio al mejor jugador de la temporada tenía varios candidatos. Salah, De Bruyne o Van Dijk podían haberlo sido, pero el más regular y el que más se enfrentó a las adversidades fue Son. En un inicio de temporada en el que Harry Kane estaba pensando todavía en su no fichaje por el Manchester City, el coreano fue quien mantuvo al Tottenham vivo. Luego, con la llegada de Conte y la mejoría de Kane, mantuvo el nivel. 23 goles, 7 asistencias y Bota de Oro (compartida con Mohamed Salah).
Jugador revelación: Joelinton. La Premier League nos ha dejado varias sorpresas de jugadores que no esperábamos. Pero la más sorprendente fue la de Joelinton o, como se le ha renombrado en Newcastle, ‘Joe Linton’. Y es que cuando más atascado se le veía en punta, Steve Bruce se lo inventó como interior. Luego, con Eddie Howe llegó a otro nivel desde el centro del campo. Su fortaleza física, zancada y poderío aéreo han dado al Newcastle otra vertiente para su medular. Desde su reconversión a centrocampista, nadie ha ganado más duelos que ‘Joe Linton’.
Equipo revelación: Arsenal. Parece una locura meter en la categoría de revelación a un miembro del ‘Big-Six’ que ni siquiera se ha clasificado para la Champions League. Lo cierto es que este Arsenal, con un equipo plagado de juventud y comandado por un Arteta que podía haber sido el entrenador revelación, ha cuajado una gran temporada compitiendo hasta el final la plaza de Champions League, e incluso siendo el gran candidato para ese cuarto puesto en muchos momentos. Esta temporada, los Gunners han creado una identidad y han encontrado el camino a seguir para llegar a las cotas altas que busca alcanzar. El año que viene hay que estar atentos a este Arsenal. Mención especial a un Newcastle que con unas pocas jornadas más se mete en Conference League.
Entrenador revelación: Patrick Vieira. La papeleta de comandar la regeneración del Crystal Palace no era sencilla y hacerlo con un técnico con tan poca experiencia en los banquillos era arriesgado. Aun así, desde un primer momento Patrick Vieira se encargó de disipar cualquier duda. Con un estilo alegre y reconocible, pero capacitado para adaptarse a distintos escenarios, el equipo del sur de Londres se fue convirtiendo en la sensación de la media tabla. Ha llegado a ganar a Manchester United, Manchester City, Arsenal o Tottenham, entre otros. Con la vuelta de Eze, la confirmación de Olise y la capacidad técnica de Vieira, el Crystal Palace tratará de dar el siguiente paso.
Jugador decepción: Romelu Lukaku. La mayoría de aficionados colocarán a Jack Grealish como el jugador que más ha decepcionado esta temporada en Inglaterra por haber sido el fichaje más caro en la historia de la Premier League. Pero, en mi caso, ya tenía dudas de su encaje desde un primer momento. Por el contrario, Romelu Lukaku, que volvía al Chelsea por alrededor de 90 millones de euros, tenía todas las condiciones para romperla de la mano de Tuchel y el belga decepcionó. Tanto que fue suplente durante largos tramos de la campaña. Una temporada para el olvido, mezclada con las polémicas declaraciones que realizó en medios italianos.
Equipo decepción: Everton. Esta temporada varios equipos han rendido por debajo de su nivel. Leeds United, Aston Villa o Manchester United eran serios candidatos, pero la temporada del Everton ha sido la más decepcionante. Es una plantilla plagada de fichajes millonarios y de grandes jugadores que ha peleado por no descender hasta la penúltima jornada. La llegada de Benítez no auguraba un gran futuro, pero ni en el peor de los casos se imaginaba un Everton tan pobre. Al final, llegó Frank Lampard y le dio un poco más de competitividad al equipo y los sacó de la quema. Anthony Gordon y Pickford, de las pocas noticias positivas del curso en Goodison Park.
Entrenador decepción: Marcelo Bielsa. Tras una gran temporada de estreno en la Premier League, esta campaña se esperaba otro paso adelante del Leeds. Las continuas lesiones de pilares como Ayling, Kalvin Phillips y, sobre todo, Patrick Bamford le quitaron su esencia al juego y a Bielsa se le cayó el equipo muy pronto. Trató de cambiar el esquema, ser algo menos arriesgado, pero nada le funcionó al argentino. Al final, en una decisión muy controvertida en la ciudad, Bielsa fue despedido y llegó Marsch para acabar salvando al equipo sobre la bocina.
Mejor joven: Trent Alexander-Arnold. Parece mentira que todavía siga optando a estos premios. Trent Alexander-Arnold es el jugador joven más asentado de la Premier League y lo lleva siendo varios años. Desde un primer momento recuperó su condición de ‘playmaker’ en el esquema de Klopp y acabó siendo uno de los mejores jugadores de la temporada. Dos goles y doce asistencias en lo que es otra campaña memorable del mejor lateral derecho del mundo.
Mejor fichaje: Marc Cucurella. Lo de Marc y Brighton parecía un ‘Match Made In Heaven’ desde que se empezó a rumorear su fichaje en verano. El canterano del Barça era un jugador que encajaba a la perfección en ese carril zurdo de Graham Potter. Lo que no se esperaba era que iba a rendir como carrilero zurdo, como lateral en línea de cuatro, incluso jugando en ambas bandas, y como central en línea de tres. En todas las posiciones, Cucurella ha sido el mejor jugador del Brighton esta temporada. Ya suena para el Manchester City, pero Marc tiene que ser inteligente y tomar un paso intermedio o quedarse en Brighton, que de la mano de Potter se puede crecer.
Momento favorito: La vuelta de St. James´ Park. El Newcastle llevaba muchos años siendo un grande de Inglaterra dormido. La poca ambición de Mike Ashley le quitó toda la esperanza a la afición Magpie, que derivó en un ambiente raro en St. James´ Park. Con el takeover de la propiedad saudí, la ilusión ha vuelto al estadio del Newcastle y lo ha convertido en un infierno para sus rivales. Destaco el ambiente que se vivió aquel 17 de octubre en la derrota (2-3) contra el Tottenham. El resultado fue lo de menos, porque la ilusión y el ruido que se generó ese día, fue mi momento favorito de esta temporada. El tempranero gol de Callum Wilson terminó por desatar la locura de un St. James´ Park que seguramente sea el estadio más enchufado de la Premier League ahora mismo.
✍️ Robbie Ruud:
Mejor equipo: Manchester City. Es muy difícil elegir quién se lleva este premio, en una liga tan competitiva. Me quedo con el Manchester City porque al final, pese al rock and roll del Liverpool, demostró tener un mayor repertorio para destrabar partidos. Siempre me pareció que el City tenía más recursos ofensivos que los Reds, pero a veces se le complicaba un poco la la toma de decisiones. Finalmente la liga se definió por detalles; el City supo soportar el vendaval y la persecución del Liverpool.
Mejor entrenador: Jürgen Klopp. Demostró tener un equipo que defiende mucho mejor que el mismo City. Sus centrales son de un orden altísimo y sus laterales, salvo Gómez de improvisado, son puñales constantes. Una pesadilla chocar con esa pared que encima cuenta con la colaboración de Fabinho y de unos extremos que llevan la presión a otro nivel. Todo esto deriva en una asfixia mortal para cualquier equipo. Impresionante. Un trabajo asombroso que le permitió al Liverpool realizar una campaña sensacional.
Mejor jugador: Son Heung-min. No es lo mismo ser estrella en un equipo ya consolidado que brillar en uno en construcción. Me parece que el coreano tiene más méritos para hacerse con este galardón que Salah, curtido y acostumbrado a tener socios de su mismo talante. No es el caso de Son, quien tuvo dos entrenadores en la campaña y se adaptó a lo que le pidieran teniendo su calidad como capital. Un genial socio de Harry Kane. A veces se le agotaban las ideas, pero es que al ritmo que se juega en la Premier no es fácil tenerla clara siempre. Pese a ello el coreano salía avante de los aprietos de forma regular con asistencias o con goles. El más “latino” de los Spurs, es Son. Un sin igual.
Jugador revelación: Rodri. Para mí no terminaba de cuajar, de tener presencia a nivel de su club. Pero ahora sí me sorprendió por su manejo, carácter y acierto. El volante español del Manchester City revolucionó la posición de mediocentro de Guardiola. Rodri tuvo que aumentar masa muscular, para ganar más duelos, se consagró como relevo ideal de Fernandinho y es mucho mejor que el mismo brasileño en sus mejores días. Aduana, muralla, gran pegada y gran visión. Podría fácilmente decantarme por alguien más joven, pero Rodri demostró que con esfuerzo se puede mejorar para dar un salto que muchos piensan que ya no puedes dar.
Equipo revelación: Arsenal. Si bien se cayó en el tramo final de temporada, tiene mucho mérito haber tirado de varios jóvenes para crear una plantilla más competitiva y con mucho gol. Sobreponerse al mal inicio de Premier (tres derrotas seguidas) y pelear hasta el final por la cuarta plaza de Champions tiene un gran mérito. Podría haberme quedado con el Tottenham de Conte, que finalmente demostró ser mejor en números. Pero a Arteta le tocó comerse momentos muy duros y aún así llevó al equipo de nuevo a la arena europea rozando Champions. Con mucho menos capital que Manchester United terminó quedando arriba de los Red Devils, que se suponían más destructivos con Cristiano Ronaldo de vuelta.
Entrenador revelación: Bruno Lage. Durante varias jornadas estuvo cerca de tener la portería menos vencida. Solo Manchester City y Liverpool le rebasaron en el rubro por varios meses. En su primera aventura en la Premier logró complicar a los grandes, no se la puso fácil al Liverpool sobre el final y consiguió tener la quinta meta menos vencida de un total de 20 equipos. Admiré mucho su trabajo en la retaguardia. Fue la segunda campaña con menos goles encajados de parte de los Wolves en una temporada de Premier League. Nada mal para su primera campaña en la liga más dura del mundo ¿alguien lo tenía a Lage con la capacidad de hacer semejante cosa? yo no.
Jugador decepción: Romelu Lukaku. En la Serie A se aburrió de meter goles, pero volvió a demostrar que la Premier ya le queda grande. En el pasado pudo haber anotado muchos goles con Everton, pocas veces desentonó con Bélgica, pero no pudo hacer pie en la mejor liga del mundo. Todos nos ilusionamos porque con el Inter había destruido todo, pero bueno, la vuelta a la Premier ha sido decepcionante para Lukaku. Aquí la fuerza no le alcanza porque se enfrenta a lo mejor de lo mejor. No pudo con la etiqueta de “Killer” que muchos aún le ponen.
Equipo decepción: Manchester United. No se pudo haber desaprovechado tanto a Cristiano Ronaldo como jugador, líder y bastión total del plantel. Ni Solskjær, ni Rangnick pudieron hacer funcionar al equipo. Un desastre. No pretendía que pelearan por la Premier con una defensa tan endeble, pero a punto estuvieron de jugar la UEFA Conference League. Vergonzoso por donde se le vea al nivel de un club como el United. La directiva, la gran responsable de todo. Un fracaso en regla.
Entrenador decepción: Ralf Rangnick. No impuso ni un pelo su presencia y estrategia en el club. La directiva le avisó en un momento que no fuera tan crítico con la plantilla y su trabajo decayó en extremo. La mayoría de sus conferencias de prensa carecieron de autocrítica y no dio el sitio que merecía a Cristiano Ronaldo. Dijo todo lo que la directiva quería escuchar. Impuso a Maguire como titular aunque fuese un desastre; nunca “domesticó” a Pogba y fundió a Elanga habiendo más alternativas de juego. Bruno se cayó a pedazos y con el entrenador alemán mostró su peor versión. Para el olvido Rangnick. Sin personalidad y sin nada que rescatar, cero.
Mejor joven: Phil Foden. Europa todavía se le atraganta un poco. Pero a la Premier ya le cogió ritmo y por primera vez en muchísimo tiempo un canterano del City se consolida a un nivel altísimo. Escurridizo, punzante, rápido, cerebral… no me termina de convencer para los altos vuelos, pero aún tiene años que ganar de experiencia para pesar en la más dura arena. Su técnica depurada y su actitud le hacen ser un muy buen jugador, con tan solo 21 años.
Mejor fichaje: Ibrahima Konaté. Un armario. Como seguidor de la Bundesliga siempre pensé que Upamecano era muy inflado por la prensa y que Konaté era el mejor defensor que tenía el RB Leipzig. El tiempo me dio la razón. Al francés del Bayern se le indigestó Europa, mientras que a su compatriota del Liverpool le fue maravillosamente bien. Muy rápido para su estatura (1.94) casi tanto como Van Dijk, con quien se complementó muy bien. Sensacional. Hay que jugar a un alto nivel para ganarle un duelo a este muchacho (22 años). Opino.
Momento favorito: El triplete de Cristiano Ronaldo al Norwich. Ese día Cristiano Ronaldo demostró que si el Manchester United todavía aspira a crear un proyecto competitivo, debe ser él la referencia para hacerlo, y no Maguire o Pogba. ¿Qué otro jugador de 37 años metió igual o más goles que Cristiano en la liga?. La pregunta se contesta sola. ¡18 tantos! Tercer mejor goleador de la Premier en esta campaña que recién finalizó ¿hace falta decir más?
👨💻 Juani Guillem
🗓️ (25/05/2022)